VARDIA
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Capital: no tiene.
Población: ¿700.000?
Etnos: 90 % Svardos 10 % otros
Recursos: Esclavos, mercenarios, oro, pieles, hidromiel.
Idioma: Svardo
Svardia es una región salvaje y fría cubierta de bosques y valles verdes,
tundras congeladas en el norte, cenagales, montes, costas pedregosas y frías,
grandes montañas heladas, ríos rápidos de aguas del deshielo. Son tierras que en
invierno suelen estar cubiertas por la nieve y conocen veranos cortos de mañanas
de niebla o lluvia o vientos del norte.
Cuando, en el siglo II DS, el filósofo arcano Teodoro el Viejo escribió su libro
De Svardii se refirió a Svardia como un conjunto de pueblos y lenguas
similares, no un reino unido bajo una misma corona. Se puede suponer que estaba
en lo cierto, pues muchos son los clanes y tribus que viajan como nómadas por el
norte o que mantienen poblados de rústicas murallas de madera y piedra. Está
fragmentada en decenas, quizá centenares, de pueblos que controlan una llanura,
o un bosque, o un valle, nunca reinos de gran extensión.
La única Ley que existe en estas tierras sin rey es la Ley de Gleind, basada en
las tradiciones de todos los hombres norteños; dicta las conductas a seguir,
como legado oral de lo enseñado por el venerado Gleind a los Hijos de Man, los
Svardos. La Ley de Gleind creó al Althing, un consejo de hombres sabios
que se reúne cada cincuenta años desde tiempos inmemoriales a orillas del lago
Svorr, en la desierta fortaleza de Heimm, aunque sólo se reúnen para contar
historias durante treinta días, para luego disolverse y regresar a sus pueblos.
En Svardia hay muchas tierras valdías. En ellas no es extraño encontrar grandes
peligros salvajes, muchas veces mortales. Son tierras ingratas con los extraños,
difíciles para los viajeros poco acostumbrados a las largas distancias
solitarias. Muchos pueblos viven de la caza abundante, otros del oro que se
puede encontrar en algunos ríos, en forma de pepitas. Hay muchos svardos que
guerrean entre si y también muchos que trabajan sus tierras como hombres libres
sin señores ni amos. Los poblados de los svardos suelen estar fortificados,
generalmente son anillos de murallas bajas en emplazamientos fáciles de
defender, con vistas ventajosas sobre los valles. Trabajan el hierro desde hace
siglos, pactan con elfos, enanos y gnolings, y generalmente odian a los magos
eruditos de tierras cálidas. Los svardos tienen costumbres bárbaras pero incluso
así son grandes anfitriones y buenos bebedores.
Los hombres svardos nacen tanto para la guerra como para trabajar la tierra,
cazar en los bosques o poseer rebaños. Excelentes mercenarios, formidables
enemigos, son famosos por su vigor y fuerza, aunque las bandas armadas svardas
difícilmente son numerosas, alcanzando el medio millar de hombres en situaciones
muy extrañas. Nunca se ha producido una situación que reuniese a más de treinta
mil svardos en armas, ni siquiera sumando dos bandos opuestos (las guerras y
escaramuzas entre svardos son mucho más que frecuentes). Algunas tribus de
Svardia están compuestas por hábiles jinetes, otras han heredado el arco largo
de los elfos o las hachas de guerra enanas. Se podría decir que no hay un tipo
común de guerrero svardo, aunque es cierto que, por encima de todo, destacan sus
exploradores de sentidos de lobo y falta de miedo.
(enterramiento de un earl svardo)
(Danthal, en las orillas del Mar de Vith)
(Aymar Vahla, el corazón del Bosque Mágico de Yoril)
(Puente de los Elfos)
WAM,
TIERRAS SALVAJES DE
(Cazador de los pantanos)
(Paso de los Enanos)
(Poblado en Swam)