UMMARK

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Capital: ¿?
Población: 15.000
Etnos: 90% Humos, 10% Gnolings.
Recursos: Mercenarios, madera, hidromiel, carne de ballena.
Idioma principal: Humo
Hummark significa “Tierra de los Hum”, también llamados Humos, sobre todo en Akenar, donde son temidos y odiados por igual.
Hummark es una gran península que cierra el continente de Draak con fiordos y glaciares de gigantesco tamaño, frondosos bosques invernales, lagos, montañas jóvenes y escarpadas e islas por doquier. El clima es duro y muy frío, con inviernos largos y eternamente nevados. Los humos y los svardos se suelen distinguir con facilidad: los primeros suelen tener la piel casi lechosa, siempre son rubios –casi albinos- y con estatura superior, los ojos siempre de azul intenso.
En Hummark hay numerosísimos reinos y pueblos libres. Prácticamente cada señor de villa se considera Rey o Señor de los Anillos, como se denomina al monarca que posee el Oro, material que muchos Humos consideran sagrado. Los
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marinos, también llamados jinetes del mar, suelen ser intrépidos navegantes, muy hábiles en condiciones oceánicas extremas. Controlan tanto el Mar de Oniss como en Mar de Vith, en sus islas hay numerosos pobladores Humos. En la región la agricultura es pobre y la ganadería bastante escasa, en las zonas del interior la caza es muy abundante y en la costa, la pesca, tanto de peces como de ballenas y, en el litoral de los Mares de Hielo, las focas. En algunos ríos de Hummark aparecen pepitas de oro, y hierro en la base de sus montañas, donde habitan enanos y gnolings. Hay buena madera y barcos rápidos, pieles, ahumados, hidromiel y cerveza.

Entre los innumerables pueblos de Hummark las relaciones son extremadamente complejas y muy caóticas. La guerra entre unos y otros es común, y tal es el carácter belicista de los Humos que tampoco es extraño que, en los años de especial necesidad, organicen razzias casi siempre contra el cálido y amable sur: la costa de Svardia, todo el litoral del Imperio de Akenar, en especial la isla de Vilonia, y tampoco se libran el Reino de Borundia ni algunos lugares del norte de Ala’i. Afortunadamente, a los Humos les desagrada tanto el calor como encontrarse lejos de sus tierras boreales y sus mares fríos, por lo que sólo en contadas ocasiones intentan establecerse en un territorio hostigado. Además, su desconocimiento de cualquier Ley que no sea la de la espada es total. No conocen el feudalismo ni nada parecido, cada comunidad sigue al más fuerte y le sirve hasta que cae, y otro más fuerte hereda lo que poseía el primero. Pocos reyes humos mueren de viejos en su lecho.
Pese a todo, los Humos rezan a dioses asgardianos, de infinidad de nombres y tipos. Es posible, incluso probable, que se trate de las mismas deidades adoradas en Svardia, con diferentes nombres, por ejemplo Gleind es llamado Wodden, y Tork es llamado Thor, entre otros muchos. Por otro lado, son algo más comunes los druidas que en tierras más sureñas.
Los guerreros Humos son valorados en los Mares Tranquilos por su falta de miedo ante las circunstancias más extremas. Aceptan la muerte como algo natural –lo que en ocasiones les lleva a realizar sacrificios humanos en sus funerales y fiestas-, y por lo tanto no la temen. Su enorme estatura les suele permitir portar armas de dos manos, inmensos escudos, hachas de doble cabeza o lanzas largas. Suelen portar armaduras de mallas, más fáciles de transportar en barco o en grandes viajes que las corazas o grandes armaduras arcanas. También entre ellos suele haber hábiles exploradores que han adoptado el arco largo élfico como propio de las regiones nórdicas, ricas en maderas recias y flexibles. Las tripulaciones de humos son temibles, así como sus ataques cuerpo a cuerpo y en batalla a campo abierto. Ante las grandes fortalezas sureñas suelen desistir con rapidez, salvo que algo les obligue.

 


(Fiordos en la costa de Hummark)


(Cuevas de los Rostros)