Grupo 1
Varios elfos se conocen casualmente en el camino a Rocamar y se hacen amigos. El destino les depara numerosos peligros juntos en tierras lejanas.
 

Ilai

El agua de vida

Las profecías de Corelion

 

La corrupción de los Ocho/El veneno del sueño

La guerra de los hijos de Onaris

 

Zoirasil

El agua de vida

Las profecías de Corelion

El anillo de Zhor

La corrupción de los Ocho/El veneno del sueño

La guerra de los hijos de Onaris

El Templo Cerrado

Auril

El agua de vida

Las profecías de Corelion

 

La corrupción de los Ocho/El veneno del sueño

La guerra de los hijos de Onaris

 

Malbec

El agua de vida

 

 

La corrupción de los Ocho/El veneno del sueño

La guerra de los hijos de Onaris

 

Gildor

El agua de vida

Las profecías de Corelion

 

La corrupción de los Ocho/El veneno del sueño

La guerra de los hijos de Onaris

 


 

LA CORRUPCIÓN DE LOS OCHO
El nigromante Ardalas se pasó gran parte de su vida investigando la hechicería de los Antiguos, totalmente fascinado con su relación con el Más Allá y con la Maldición del Dios Sin Nombre que había arrasado la civilización en tiempos de la Guerra de Sangre. Tanto lo estaba que antes de que las tierras de Erioch sufriesen el Velo, el elfo viajó a la misma Antigua para inspeccionar las ruinas. No pudo avanzar mucho debido a los mortales peligros que acechaban a los intrusos, pero sí lo suficiente como para encontrar un viejo templo con algunos pergaminos a los que llamó El Libro de los Muertos. Con él regresó a Eria y temiendo que el estudio de sus páginas le volviese loco, invitó al príncipe Aesir a leerlo. Fue así como el hombre perdió el juicio y se convirtió en lich, refugiándose en la Torre de los Mil Cuervos para proseguir con la lectura interminable del tomo. Antes de que eso pasase el príncipe dejó algunas notas a Ardalas sobre los contenidos impíos del libro maldito, y éste las transcribió a su libro de conjuros. Se trataba de terribles hechizos de muerte, aterradores, inhumanos, basados en el dolor, en la oscuridad y el mal. Ardalas, a lo largo de su vida, hizo amplio uso de dichos conjuros contra los hombres. Quiso el destino jugarle una mala pasada y los que acabaron con él, siglos después, fueron elfos, contra los que nada pudo hacer con tales artes oscuras.

 

Muerto Ardalas, parecía que los pergaminos del Libro de los Muertos encontrarían su fin pero resultó que no. La curiosidad y ansia de poder de la maga elfa Zoirasil la llevaron a salvar el libro de conjuros del Nigromante y llevarlo consigo a Eria, a la ciudad de Minas Ator, donde residía uno de los magos más poderosos del Orbe llamado Otiluke, del Círculo de los Ocho. Otiluke era un mago evocador de tremendo poder. Llevaba viviendo seis siglos, pero no todo eran virtudes en él. Era glotón, le gustaba demasiado el vino y tenía una insaciable curiosidad por los objetos de poder. Llevaba tiempo en la ciudad esperando a que el Senescal le otorgase la gracia de poder ir al Templo Cerrado, uno de los enigmas del sur del reino. Cuando el grupo de elfos apareció y Otiluke se enteró de que tenían el libro de conjuros del Nigromante el mago se olvidó de la prudencia y, fingiendo un falso enojo, acabó por robar los pergaminos a los PJs. No tardó ni una noche en leerlos y, siendo humano, su mente se perturbó de inmediato. En unas horas pasó de ser glotón a voraz y de ser curioso a implacable, cabrón y malvado.

 

En aquellos días el Círculo había de reunirse, como lo hacían anualmente, y el malvado Otiluke estuvo midiendo sus posibilidades de matar a sus viejos aliados. Incluso con el factor sorpresa y su enorme poder, no podía estar seguro de triunfar contra siete, de modo que pensó que ya que no podía derrotarlos -y ellos sin duda notarían algo raro en él- lo más sabio sería tenerlos de aliados. Así que les tendió una trampa preparando los pergaminos para que todos los pudiesen ojear las noches antes de la reunión, pues iban llegando gradualmente. Serían el propio Otiluke, (evocador), Ranh Merion/Leomund (archimago), Mordenkainen (conjurador), Tenser (encantador), Rary el Traidor (abjurador), Nystul (adivino), Melf (ilusionista) y Bigby (transmutador). Según llegaban Otiluke les anunciaba un espectacular hallazgo y, confiando en su aliado de siempre, encontraron la ruina uno tras otro con una sola excepción: Rary el Traidor. Al leer los terribles pergaminos el abjurador se protegió a tiempo y no sufrió los efectos del mal, pero supo al instante que sus antiguos aliados estaban corruptos sin excepción. Por si no estaba claro, Tenser aquella noche violó a la maga elfa Zoirasil y Bigby mató a un caballero de la guardia. Además, estando todos juntos, interrogaron a Rary. Todos sabían de una manera u otra que él era el guardián de un antiguo secreto desde hacía mil años y, si bien siempre habían resistido la tentación de preguntarle, sus nuevas mentes malignas no encontraron ninguna traba o reparo. Rary tuvo que huir de la torre de Otiluke haciéndose invisible con una antigua poción sigia y, tras eso, pensó en regresar a Draak usando uno de los Portales de St. Cutbert (pues había dos en Eria). Sin embargo antes de eso recordó la terrible afrenta que la elfa Zoirasil acababa de sufrir e imaginó que sus compañeros (los PJs) querrían vengarse y visitarían a Otiluke y Tenser sin ser conscientes de que morirían en ello. Rary se fué al castillo de la ciudad y les buscó, encontrándolos en una estancia, muy tensos. Incluso Gildor, el paladín, llegó a atacarle pero Rary -aparte de no correr demasiado peligro- tuvo la empatía de entender su enojo y disculparle. Tras eso les explicó que debía irse de allí y les contó que los Ocho -mejor dicho los Siete- habían caído bajo la corruptela del mal y que no debían ir allí o morirían. Sin más. Ya de camino al castillo había discurrido un plan: conocía una historia sobre un monstruo que vivía en las ruinas de Sadgeton, no muy lejos de allí, a una semana a caballo. La bestia escupía un veneno que los alquimistas erios llamaban "baba de sueños" que sólo con el contacto te dormía, si no tenías sangre faérica. Ellos, todos elfos, eran el grupo perfecto para ir allí y conseguir el líquido con el que luego podrían dormir a Otiluke. Sólo un druida podía hacer un preparado que despertase al afectado pero mientras tanto dormiría como un oso en invierno. Obviamente Rary pensaba que podría encontrar una solución para aquello pero debía estudiar el asunto con detenimiento. Se volvería a su estudio en la isla de Auria donde, además, estaba su hijo Asmund. Allí pensaría algo. Dejó pues a los elfos encargados de neutralizar a Otiluke y les prometió buscarlos más adelante. Tras eso se teleportó a Galvan.


Rary el Traidor, al que llamaban también el Guardián del Tomo, había nacido bajo la profecía de que un día traicionaría a los suyos.
Otiluke, el mago evocador más poderoso que existía, amante del vino y la comida pero un formidable enemigo en batalla e incansable buscador de tesoros.
Rahn Merion (Leomund), Leomund era un mago arcano de inmenso talento pero había sido pobre toda su vida. Cuando sus poderes medraron se hizo rico y se cambió el nombre por Ranh. No tardó en comprar un título y apellido nombre en Akenar, los Merion. Bajo el nombe de Rahn Merion se erigió como Archimago de la Orden de Magia tras muchos años de estudio y hechicería, se dice que dominaba todas las artes arcanas con maestría única. Líder de la Orden de Magia, sabía que siendo malvado no duraría mucho en Azur así que eligió transportarse a la costa y regresar en un navío elfo mientras planeaba algo. En el viaje se le ocurrió crear la Torre del Dominio y fingir su muerte para librarse de los otros Ocho. Eligirá al aprendiz Enoch para tomar su cuerpo pero el plan le saldrá mal y su alma queda congelada dentro de una joya que el joven mago lleva en su zurrón mágico. .
Mordenkainen quizás el más famoso de todos los magos vivos. Dicen que aspiraba a ser el Archimago pero Rahn Merion le batió en combate singular en las Pruebas de Archimagia, lo cual le denegó el puesto. A pesar de sus grandes poderes se le conoce por su legendaria inteligencia más que por su magia. Regresó a su torre y se encerró. Expulsó a todos sus aprendices y desatendió numerosos asuntos en todo Draak. Está estudiando cómo controlar el dragón de Mérilon. Si los PJs dejan pasar suficiente tiempo se irá Hummark a conseguir el famoso Cuerno del Dragón, aunque se hará con el control de dos o tres clanes fingiendo querer hacerse Rey de Hummark mientras busca el artefacto que sirve para comandar dragones.

Tenser volvería al día siguiente a Akenar, donde planearía fechorías varias.
Nystul mago alino adorador de Istus, Diosa del Destino. Utilizaba sus dotes de adivino para predecir acontecimientos. Reyes y Príncipes se disputaban sus servicios. Volvió a Ala'i e instigó para llevar la guerra a los territorios cruzados. Asesinó al Califa en una batalla y a toda su familia en Mirra, tras ello se erigió como sucesor aunque hay dos hermanos gemelos bastardos del Califa que no consigue encontrar en Ala'i.

Melf ilusionista ilko, solía residir en la ciudad de Tyrus, en el Principado de las Islas. Muchos le llamaban "el Comerciante" por su obsesión por los negocios y las apuestas. Regresó a Tirus y fundó una escuela de asesinos secreta que mata a quien sea por dinero, se llama el Espejo Escarlata.

Bygby mago de la Orden de Magia, residía en Agon, en Vúlpara. Se hablaba de su costumbre de convertirse en mujer, bajo el nombre de Ágata. Estaba obsesionado con el arte y el teatro. Ahora se ha convertido en lo que llaman el Peregrino Errante. Viaja arbitrariamente por Draak y a veces se hace con una posada durante un mes, otras veces asalta a quien le apetece o se pone a servicio de algún grupo de bandidos de forma arbitraria antes de cansarse de ellos -y matarlos-. Su objetivo favorito son los cazadores de brujas, los inquisidores y los buscadores de la Luz.


EL AGUA DE VIDA

En la lejana y desconocida isla de Mu, muy al sur del Gran Océano, existen siete tribus de marinos que habitan la isla, adoradores de Ao. Los vientos y las aguas peligrosas que rodean aquellas tierras hacen muy difícil que un navío entre en ellas de modo que todos los barcos que salen de la isla y se adentran en el mar tienen muy pocas posibilidades de regresar.

Hace varios siglos uno de los señores de las islas llamado Elennor, semielfo, decidió arriesgar la vida explorando las aguas más allá de la costa y para ello fabricó un barco que podía navegar por los cielos gracias a la madera de un extraño árbol que sólo existe en los bosques de Mu cuyas ramas flotan en el aire. Con dicho barco y un grupo de valientes marinos de cada una de las siete tribus salieron de la costa y se alejaron. Tras un mes de ver únicamente océano acabaron viendo una costa desconocida donde hicieron tierra por primera vez en la historia de Mu. Se trataba de algún lugar al sur de Ankay, pero no era un lugar cualquiera, se trataba del Monte Shagarmat, la montaña más alta del Orbe donde jamás había llegado humano, elfo o enano. Sobre la montaña había una fuente natural de la que manaba el agua más increíble que un hombre ha probado jamás. De inmediato les curó todos los males y les cerró heridas, aparte de otorgarles un don diferente a cada marino que la probó y al mismo Elennor. Se desconoce la procedencia del poder de la fuente pero ellos la llamaron Agua de Vida pues cuando la encontraron hacía días que no llovía y pensaban que morirían por no tener nada que beber. Se llevaron varios toneles de esta agua con ellos.

Tras ese encuentro viajaron por mucho tiempo por Ankay dando origen a las numerosas leyendas sobre los hombres pájaro de Mu. En Sigia se hicieron amigos del faraón y aprendieron de los Hechiceros Reales, a cambio de la mitad del Agua de Vida que poseían, el antiguo arte de crear Obeliscos de Poder y animar con magia objetos, a los que llamaron golem, una antigua palabra tresia. Continuaron su periplo y llegaron a los Mares Tranquilos, donde originaron sin pretenderlo el culto del dios Fharlanghn, dios de los vientos y las tormentas. Cansados de vagar por el Orbe, planearon regresar a Mu, pero estaban muy lejos y sus fuerzas estaban muy menguadas. Decidieron descansar un tiempo y por ello, usando golems, construyeron un refugio en la costa, en el único punto de Draak en el que llegaron a desembarcar, unos acantilados al sur de Levante. Para sostener el Refugio cada uno de ellos cedió parte de su vitalidad a una piedra mágica creada por Elennor a la que llamaron Prisma. Vertieron el Agua de Vida que les quedaba en uno de los pozos de una gruta que encontraron y pronto se dieron cuenta de que se había creado un enlace entre la fuente y el Prisma. Alrededor del agua empezaron a crecer plantas subterráneas.

El refugio era una gigantesca estatua de un navegante de Mu, en Punta Silar. Muchos siglos después los arcanos la llamaron Estatua del Conde pues ignoraban por completo su origen. En la puerta rezaba la siguiente inscripción:

"Que el Gran Ao cuide a aquellos que entran en este Refugio con buena voluntad y que Su ira caiga sobre los enemigos de Su morada."

y en el interior:

"Los Hijos de Ao llegaron a este Refugio en el Quinto Año de la Serpiente, que las estrellas alaben a los llegados a estas extrañas tierras allende los mares."

Elennor planeaba descubrir el secreto de la madera mágica de su barco estudiándola para tratar de pasar las propiedades a la piedra. De esa forma se construirían un castillo y se irían con él regresando a Mu. La investigación llevó mucho tiempo y en el transcurso del mismo tuvo la desgracia de inventar, sin querer, las gárgolas, mezclando golems con piedra sin peso. Finalmente cuatro de los magos marinos, Luj, Arai, Yhan y Yek, creían haber encontrado la fórmula de la piedra sin peso. Por desgracia no fue así y en las primeras pruebas, cuando pensaban que habían construido una torre voladora, ésta se vino abajo entre las rocas y los cuatro fallecieron junto con las esperanzas de Ellennor de volver a ver su hogar en Mu, pues para estudiar la madera del barco habían tenido que desmontarlo. Elennor murió de viejo en el Refugio, años después. No fue el último de los Hijos de Ao en fallecer pero tras su muerte el ocaso de los marinos fue rápido e implacable. Su símbolo era una estrella de siete puntas, una por cada tribu.

Un hecho remarcable: Oliver Corbus, uno de los hombres más famosos de Akenar, era pastor por estas tierras y empezó su vida de aventuras entrando en la Estatua del Conde.

El agua de vida fue bebida por los PJs y les otorgó los siguientes poderes:

-Ilai: retorno de la muerte, en una ocasión el elfo podría traer a alguien del más allá robándole el alma a los dioses sin consecuencias. El poder fue usado en Erioch para resucitar a Zoirasil.
-Zoirasil: sueños premonitorios, la elfa de vez en cuando tiene sueños que se cumplen en un 100% de los casos
-Auril: espejo mágico, toda magia que trate de dañar a Auril será espejada contra su agresor
-Malbec: magia de sangre, el agua le otorga poderes del más allá en forma de invocaciones tenebrosas (2). Por cada 1d10 de daño que se haga, el personaje podrá lanzar un conjuro de hasta nivel 2 de la lista de warlock.
-Gildor: ver lo que no se puede ver, el paladín tiene una visión verdadera (True Seeing) permanente.

TAIN

El feudo de Tain tiene como símbolo un cuerno de guerra élfico sobre fondo verde. Es el único condado del Reino de Eria cuyos señores son elfos y son vasallos directos del Rey. Esto lleva siendo así por siglos. El condado está ubicado en una zona peligrosa al sur y obtiene grandes beneficios debido al comercio del Río Rojo y a los viñedos al norte del mismo.

La casa Ewan es la que mantiene el título. Los asuntos del castillo son un poco turbios pues el cabeza de la familia, Gael Ewan, lleva siglos estando con su hermana y por eso ni tiene hijos ni prometida; esto es un secreto a voces, de la misma forma que el tercer hermano, Laar, también tenía pretensiones sobre la hermana y por eso discutieron hace trescientos años (no se hablan). La corte del castillo es una urdimbre de tramas y celos. El bardo, Astyr, está enamorado del conde. Todos los hombres del castillo están prendados de Lady Alisa y no por voluntad propia en todos los casos sino por una profunda red de encantamientos. Lady Alisa, al ver al grupo, encontrará una nueva distracción de modo que tratará por todos los medios de retenerlos en Tain, por las buenas o por las malas. SI los PJs no que quieren quedar, convencerá al conde Gael para que les haga prisioneros por su apoyo a Juvens. Podría incluso raptar a uno de los PJs y mantenerlo cautivo en una torre si encuentra la oportunidad.

 

-Astyr, el bardo de los Ewan, enamorado de Alisa, trata de evitar por todos los medios que los PJs se queden en Tain.
 

SADGETON

Sadgeton es una antigua ruina famosa en todo el Reino de Eria. A cualquiera que se le pregunte, campesino o erudito, tendrá una versión de lo que hay allí. Un grifo, una quimera, un dragón, un lobisome, una musaraña o un basilisco.

La verdad es que hay una quimera (pag. 39) que está bajo las órdenes de un Hezrou (pag.60). Al hezrou se le conoce en el bosque como el Hombre Gris, que exige a los trasgos de la región que le traigan una víctima todos los meses. Para eso tiene una estaca en la entrada de las ruinas del viejo monasterio. Si el día que llegan los PJs sacan un 13 en 1d20, coincide que una banda de trasgos ha venido a traer a un campesino (Roldán) para que se lo coma el Hombre Gris.

 

-Muerta la quimiera el Hombre Gris se enfada mucho y sale de donde suele dormir a ver quién ha matado a su mascota.

LAS PROFECÍAS DE CORELION
Desde tiempos de Antigua creen los seguidores de Corelion que existen las llamadas Profecías de Corelion, cuyo contenido secreto sólo lo conocen los Sumos Sacerdotes (es decir, clérigos por encima de nivel 10). Se trata de 113 Profecías que en realidad son más consejos de cómo afrontar problemas bastante ambiguos. La última de dichas profecías sería el nacimiento del Elegido en algún lugar al sur de Yvonesse (es decir, Nanya). Los clérigos del dios élfico se preguntaban entonces si ese era el final de la guía espiritual pero uno de dos estudiosos del Bosque de Ován, Aluna Mara y el hechicero Loras, hicieron saber a las Bóvedas que existía la posibilidad de que las Profecías no hubiesen llegado a su fin pues en algunos textos se hablaba de dos tablillas, no de una. Podía ser que cuando el pueblo élfico se dividió los elfos del este se llevasen una y los del oeste otra. Tras caer Elwyn y el Imperio Lunar, el mayor de los reinos élficos del Este era Myth. Decidieron, pues, enviar al grupo liderado por Ilai para averiguar si la segunda tablilla de Corelion se encontraba en aquel reino lejano con el que habían perdido contacto tiempo atrás.

 

-El grupo está en camino.
 


COMPLETADAS


LA CAÏDA DE ERIOCH
EL MENSAJERO DIVINO

EL TEMPLO DE CORELION EN MINAS ATOR
LA JOYA VERDE
LA MASACRE DE ROCAMAR