GAH (St. Cuthbert)

 

Descripción & Dogma: Gah es el dios arcano de la Justicia. Se trata de una religión monoteísta, aunque existen numerosos santos y el propio Hijo de Dios, llamado Sillevan. De hecho en muchas partes del Orbe se adora a Gah a través de la reverencia a la figura de Sillevan, el hijo santo de St.Cuthbert que fue enviado al mundo para salvar en el Arca a los seguidores de su padre y murió sacrificado por ello. Precisamente por eso a los erios que cruzaron el Gran Océano se les denomina arcanos o descendientes del arca. Las enseñanzas de Gah son sabias, prácticas y sensatas. Entre sus seguidores la Palabra del Señor es ley y sus seguidores se esfuerzan en extender su mensaje de forma que todos se puedan beneficiar de la sabiduría de Gah. Flaquear en la fe y actuar contra las enseñanzas del Señor es algo intolerable, especialmente entre sus creyentes. Gah incita a sus seguidores a realizar esfuerzos crecientes para incorporar a los descreídos al redil de su rebaño.
 

Culto: En el Imperio de Akenar existe una Iglesia organizada que representa una de las organizaciones más poderosas del Orbe, cuenta con una rama Secular (el Siglo), otra Regular (la Regla) y otra Militar (los Miles). El Clero Secular está organizado piramidalmente, la cabeza es el Emperador seguido por Obispos, Arciprestes y Párrocos, son la base de la Iglesia propiamente dicha. El Clero Regular sigue distintas reglas dependiendo del santo que la fundase, son monjes de monasterio o convento. Por último está el Clero Militar, el único que no tiene impuesto el celibato, que se mantiene por sus propios medios (el resto del clero disfruta de una renta o congrua) y trata de llevar la palabra del Señor allí donde va. La Inquisición es una Orden Regular, por poner un ejemplo. La religión sillenita es compleja, se celebran misas comunitarias todos los dóminus (los domingos), existe bautismo para aceptar a nuevos miembros y matrimonio. Los muertos siempre los entierran, es poco sillenita el quemar a los muertos (se considera una costumbre pagana, que ofrece el alma al cielo). Como Dios de la Justicia, Gah también es Dios del Perdón, existe redención posible para cada pecado: para ello se instauró la costumbre de la confesión por la cual los pecadores hablan de sus faltas al clérigo que para absolverlos a los ojos de Gah les pone una pena, ya sea económica o de otro tipo. En casos de pecados mortales, como la traición o el asesinato, la pena para el "perdón de dios" puede ser la muerte. La Iglesia suele aceptar el Juicio de Armas como redentor o la peregrinación a las ciudades de Akenar, Nevesy o Salé. El Terreno Sagrado es algo muy respetado por los sillenitas y por la mayoría de sus oponentes, se considera que todo aquel que lo respete -sea quien sea- tiene derecho a protección. Romper esta norma es un pecado importante y, por supuesto, desvanece cualquier beneficio o refugio.

Signo Sagrado: Una cruz.  

Virtudes: Para la religión sillenita las principales virtudes son la justicia, honestidad, la sinceridad, el sentido práctico y la racionalidad. También son valoradas la austeridad, la paciencia y la piedad.

Más allá: Los sillenitas creen en una existencia celestial después de la muerte.


Avatares: Algunos de sus santos pueden ser considerados avatares, como el propio Sillevan, Santa Marion, San Mahk, San Darion, San Gerónimo o San Dionis, entre otros.

Antítesis: El eterno rival de Gah es denominado El Invisible y no se refiere a ningún ente en concreto sino a todos aquellos que se oponen frontalmente a lo que es bueno o justo. Por otra parte cualquier forma de nigromancia se considera impía puesto que atenta contra el cómo deben ser las cosas.

Otros dioses: Los sillenitas toleran otras religiones, sobre todo en el Imperio, por la convicción de que su ejemplo acabará por desmoronarlas.